En un intento desesperado por obtener una compensación de un seguro de auto que nunca debieron reclamar, dos amigos, de apellidos Schiel y Verón, tejieron una red de engaños que, finalmente, colapsó bajo el peso de la verdad.
La historia comenzó cuando Schiel denunció el presunto robo de un Peugeot 207, patente LGD189, que, según él, había desaparecido de la casa de su hermana en la calle Francia. Sin embargo, la versión inicial se desmoronó rápidamente cuando la Policía interrogó a la hermana y confirmó que el vehículo nunca estuvo fuera de su residencia.
Desesperado por mantener la falsa historia, Schiel cambió su versión y afirmó que el automóvil había sido robado de la casa de su amigo y socio, Verón, ubicada en Berrondo y Brasil. Lo que hizo que esta versión resultara aún más impactante fue la alegación de Schiel de que había estacionado el coche allí debido a un romance con la pareja de Verón.
Sin embargo, la trama urdida por estos amigos comenzó a desmoronarse cuando la Policía revisó las cámaras de seguridad de la zona y confirmó que el vehículo nunca estuvo estacionado donde afirmaban. Además, el lector de patentes captó la salida del automóvil con dominio LGD189 de la provincia el 8 de octubre en Vizcacheras, lo que contradecía la historia de su supuesto robo.
La farsa finalmente llegó a su fin cuando la novia de Verón se quebró y confesó la verdad. Reveló que habían vendido el Peugeot a “gente de Justo Daract”, quienes solo habían pagado una cuota de la venta. Posteriormente, recuperaron el vehículo y lo vendieron nuevamente, pero esta vez a una persona desconocida que desapareció.
Por orden del fiscal instructor José Olguín, Schiel y Verón fueron demorados y enfrentarán cargos por “Falsa denuncia”. Su elaborado plan para cobrar un seguro de auto ha tenido graves consecuencias legales que seguramente servirán como advertencia para aquellos que intenten engañar al sistema.
Esta historia de engaño y traición pone de manifiesto la importancia de la honestidad y la integridad, y cómo las mentiras pueden tener repercusiones devastadoras en la vida de quienes las tejen. En Villa Mercedes, la verdad se ha impuesto, y Schiel y Verón enfrentarán las consecuencias de sus acciones.
Comments