Economía

El Gobierno define qué hará con el “dólar ahorro” y busca bajar el “contado con liqui”

0

El Gabinete Económico mantuvo reuniones durante el fin de semana en la Quinta de Olivos para definir qué hará con el dólar. Con distintas opciones sobre la mesa, el Gobierno buscará desde esta semana estabilizar la brecha cambiaria sin acudir a una devaluación que encarezca las importaciones y los commodities exportables en moneda local y que, por lo tanto, implique más inflación y una mayor pérdida del ya deteriorado poder adquisitivo. La estrategia será sobre dos frentes: el “contado con liqui” y el “dólar ahorro”.

“Es un problema”, respondió Alberto Fernández el 15 de agosto, cuando le preguntaron sobre la gran cantidad de ahorristas que, mes a mes, van en busca de su cupo de 200 dólares mensuales. Ese mes, unas 4 millones de personas compraron divisas para atesorar o revender en el mercado paralelo, 10 veces más que en marzo.

En la primera semana de septiembre la sangría de reservas continuó, ahora cruzada por el final de la “temporada alta” de liquidación de agrodólares. Si en agosto el BCRA terminó con un saldo de ventas netas de divisas superior a los U$S1000 millones, solo el 1 de este mes se desprendió de otros U$S241 millones netos, según datos oficiales.

Dale clic

En la tarde de ese 15 de agosto en el que Fernández blanqueó el problema del dólar ahorro, el Ministerio de Economía debió desmentir que pensaran aplicar mayores restricciones al atesoramiento en divisa. Este viernes, Martín Guzmán confirmó la continuidad del cupo de U$S200 y dijo que el Gobierno buscará estabilizar la brecha cambiaria. Es el principal opositor a que se prohíba la operación y la voz más escuchada por el Presidente.

La opción de desdoblar formalmente el tipo de cambio perdió terreno. Cecilia Todesca, vicejefa de Gabinete, había admitido en declaraciones radiales que era una posibilidad concreta. “Se tiene que discutir”, dijo. “Es una incomodidad la brecha del dólar, tenemos problemas estructurales en el mercado de cambios. No nos encantan los controles cambiarios, pero tenemos que ir trabajando sobre esto”, agregó.

El desdoblamiento implicaría fijar un dólar financiero y para ahorro a un precio distinto, más alto, que el dólar comercial para importar y exportar. Existen, en los hechos, distintos tipos de cambio en el país: desde el dólar “barato” al que se liquidan las exportaciones de soja (tipo de cambio oficial menos retenciones) hasta el blue.

El problema es que cuanto más tipos de cambio haya, mayor es el incentivo a que los grandes exportadores eviten liquidar al dólar comercial (mediante maniobras de subfacturación) y a que los importadores inflen sus compras para acceder a más divisas baratas (sobrefacturación).

“Hoy hay distintos tipos de cambio en la Argentina. Nosotros apuntamos a una política consistente para acumular reservas e ir normalizando la cuenta de capital”, dijo Guzmán el viernes, al anunciar la reestructuración del 98,8% de la deuda en dólares emitida bajo legislación local, por U$S41.715 millones.

A bajar el “liqui”

Tanto el Banco Central como la Anses participaron del canje y obtuvieron títulos que ahora podrán vender en el mercado secundario. El BCRA, según estimaciones privadas, tendrá U$S7500 millones para operar en el “contado con liqui”. Es el equivalente a un año de mercado, en los volúmenes actuales. Solo esa señal debería bastar para tranquilizar esa operatoria, pero las fuentes oficiales anticipan que están dispuestos a usar ese poderío, incluso a sabiendas de que se destinarían recursos públicos para “financiar la fuga de capitales”.

El Banco Central puede operar esos bonos desde este lunes, pero el feriado en los Estados Unidos -y la consecuente caída de los volúmenes operados- corrió ese “día D” hasta mañana.

Los 200 ¿con recargo?

En paralelo a la baja del “contado con liqui”, es casi un hecho que el dólar ahorro se encarecerá. Con el desdoblamiento casi descartado, la alternativa será una mayor carga impositiva. No subirá el impuesto PAIS, del 30%. Para eso, el Ejecutivo tiene que enviar un proyecto de ley al Congreso. Cobra más fuerza la opción de recurrir a un viejo conocido: el anticipo del impuesto a las Ganancias.

Como ocurrió en 2014 y 2015, la compra de dólares para atesorar y los gastos con tarjeta de crédito en moneda dura estarían así gravados con un adelanto a cuenta de Ganancias. Sería una recarga adicional al 30% del impuesto PAIS que se aplica sobre la cotización minorista. Lo que se pague se descontaría del impuesto al efectuar la declaración anual y no mes a mes. Quien compre dólares y no esté alcanzado por Ganancias, deberá tramitar la devolución ante la AFIP.

En los hechos, eso llevaría al dólar “solidario” desde los actuales $102 promedio a un nivel parecido al “contado con liqui”, que actualmente opera con mucha volatilidad entre $120 y $130 pero que debería bajar si el Banco Central interviene.

El Gobierno, como contó iProfesional, piensa dotar de más liquidez al mercado de “contado con liqui” eliminando el parking, el requisito de mantener los bonos durante cinco días hábiles antes de convertirlos en divisa. Eso permitiría al BCRA operar más ágilmente y, entienden fuentes oficiales, agregaría más volumen cuando, como espera el Gobierno, la divisa se acomode.

Todo este debate está también cruzado por la presentación del proyecto de ley de Presupuesto 2021, la próxima semana. Allí no solo se explicitarán las variables macroeconómicas (el déficit primario del 4,5% del PBI que adelantó Guzmán, el tipo de cambio esperado, la inflación estimada), sino también definiciones sobre cuánto piensa recaudar el Gobierno y de qué forma, y cuál será el auxilio financiero que el Tesoro requerirá del BCRA.

 

Tu opinión es importante

Comments

Comments are closed.