El contexto epidemiológico de la ciudad mejoró y el panorama es alentador para los villamercedinos. Pero para mantener las cifras bajas, el Comité de Crisis asegura que continuar con las medidas de autocuidado, como el distanciamiento, el uso correcto del tapabocas y el lavado constante de manos, es clave para evitar un rebrote.
En los últimos reportes diarios, los números de casos de coronavirus van en descenso, lo que significa una cierta estabilidad para la ciudad. “En los últimos siete días, contando a partir del miércoles, se registraron 340. Pero veníamos de jornadas en las que solo por día se registraban entre 190 y 240”, comparó Graciela Sarmiento, referente del Plan COVID-19 en San Luis.
La funcionaria provincial destacó que la duplicación de los casos supera los 60 días. “Está en casi 65, ese es un dato sumamente importante que genera tranquilidad. Pero hay que entender que como sociedad tenemos un gran desafío que es poder mantener estos datos a lo largo del tiempo. Poder controlar el brote y evitar que se vuelva a disparar depende de la conducta de cada uno”, aseveró.
Los buenos resultados son, señaló Sarmiento, debido a las medidas que se implementaron para frenar el avance del virus y el compromiso de la sociedad. “Tenemos dos herramientas preventivas que son fundamentales. Una tiene que ver con aplicar el distanciamiento de dos metros o más, el uso correcto del tapabocas, es decir, que cubra nariz y mentón, y el lavado frecuente de manos. Pero además, el accionar que se llevó adelante ante un virus que es de circulación comunitaria”, dijo.
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