Romina Jaime (23) y Mónica Zingman (63), madre e hija, esperaron el veredicto de la Cámara del Crimen 1 tomadas de la mano. Minutos después, este viernes por la tarde, fundieron sus cuerpos en un abrazo. Juntas enfrentaron un juicio desde el lunes 25 de septiembre, juzgadas bajo la sospecha de haber matado al hijo recién nacido de la más joven en el Hospital del Sur, en la capital, en 2019.
En fallo dividido, Jaime fue condenada a 8 años de prisión “como autora de homicidio calificado por el vínculo mediante circunstancias extraordinarias de atenuación”. Los integrantes del tribunal Silvia Inés Aizpeolea y Jorge Eduardo Sabaini Zapata votaron a favor; José Luis Flores lo hizo en disidencia.
Mientras que Zingman fue declarada “autora del delito de encubrimiento agravado exento de responsabilidad penal”. La cámara dispuso su “inmediata libertad”.
Aunque los abogados defensores (Néstor Zavala Agüero y José Olguín) habían pedido la absolución para ambas en los alegatos, mostraron una sonrisa de satisfacción. De todos modos, anticiparon que van a apelar la condena de la joven. La fiscal, Virginia Palacios, había solicitado 10 años para ambas.
Info: ED
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