El veredicto dejó sin sentencia a Mabel Tyempertyopolos, dueña de la empresa Polo, por el beneficio de la duda.
Este miércoles fue la segunda y última audiencia del juicio oral por la muerte de seis niñas y dos docentes del Colegio Católico Santa María, en el accidente ferroviario de Zanjitas.
Después de una extensa jornada de alegatos, que concluyeron cerca de las 15:30, se conoció el veredicto de la Cámara Penal Nº 2, que determinó absolver a Mabel Tyempertyopolos, dueña de la empresa Polo en la que viajaban alumnas y las maestras el trágico 2 de noviembre de 2011, por el beneficio de la duda.
Los familiares de las víctimas aseguraron que no les sorprendió el resultado del juicio. Luego de la lectura, una de las madres que pedían justicia recordó que el chofer que causó la tragedia está libre y trabaja en la empresa a pesar de que asumió la culpabilidad del hecho.
“En este juicio quedó demostrado que hicieron todo mal, que un empelado que trabajaba en negro tomaba las decisiones. Nadie sabía nada, ni la directora del colegio, ni la dueña de la empresa. No sabemos en qué manos dejamos a nuestras hijas”, expresó la mamá de una de las fallecidas y añadió que “el perdón de Tyempertyopolos debería haber llegado mucho antes del juicio, y que no le creen nada de lo que dijo”.
Los tres abogados querellantes pidieron que la empresaria fuera condenada por “homicidio culposo y lesiones culposas, agravadas por la pluralidad de víctimas”. Y el fiscal de Cámara 2, Fernando Rodríguez pidió 4 años de prisión y 8 de inhabilitación para gerenciar empresas de transporte público.
El defensor de la empresaria, Marcos Juárez, había pedido la absolución de la acusada.
F: ED
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