Alejandro Passarelli, un médico rionegrino de 59 años que estaba internado hace doce días en grave estado en la Clínica San Agustín de Neuquén, murió por coronavirus y elevó a trece las víctimas fatales en el país por esta enfermedad.
Señalaron que Passarelli, cuya muerte fue confirmada por su hermana en las redes sociales, había realizado un viaje a Europa y que arribó a la Argentina el 13 de marzo. Es la primera víctima fatal correspondiente a un paciente de Río Negro.
En medios de comunicación de esa provincia indicaron que a pesar de presentar síntomas compatibles con COVID-19, el diagnóstico fue difícil de establecer y que el primer análisis enviado al instituto Malbrán había arrojado un resultado negativo.
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