La ciudad de Río de Janeiro presenta un aumento de casos de Covid que continúa incrementándose en los primeros días del año. Desde el 1° de enero aumentaron las filas para realizar testeos en los centros de salud, farmacias y laboratorios. Este aumento de casos y de personas con síntomas testeándose se relaciona con la llegada de la nueva variante Ómicron a la ciudad.
Según los datos oficiales, las cifras comenzaron a tener un aumento sostenido de casos. Si bien hubo un apagón en la base de datos del Ministerio de Salud luego del hackeo al sistema el 10 de diciembre, el 12 de diciembre se registraron 18 personas positivas de Covid. Mientras que el 25 de diciembre subió a 269 casos confirmados y, para el 1° de enero se diagnosticaron 1238 contagiados. En 20 días el incremento de los casos fue del 6.778%.
Rio de Janeiro no presentaba tantos contagios en un mismo día desde el 30 de agosto durante la segunda ola causada por la variante Delta. Los 1238 casos corresponden a las personas que comenzaron a sentir síntomas a partir del 1° de enero. Estos casos podrían aumentar en los próximos días teniendo en cuenta lo que dejó la llegada del año nuevo y las fiesta “Reveillon” en las playas de Río donde una multitud de gente recibió el año con un show de fuegos artificiales.
La tasa de positividad alcanzó el 41% en estos primeros días del año, antes era de un 13%. Estos números indicarían que la tasa de positividad y los contagios podrían aumentar en los próximos días. Ni en la segunda ola en el 2021 la ciudad de Río de Janeiro había superado el 40% de positividad, sin embargo, si contaba con una tasa alta de alrededor de 1000 internados y 500 en Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
Diego Xavier, epidemiólogo e investigador de Monitora Covid19, compara las experiencias de otros países frente a Ómicron y observa que en Brasil los casos también tenderían a subir. También remarcó su preocupación sobre los viajes de vacaciones que incrementarían esta suba de contagios, pero que la vacuna ayudaría a que la situación no empeore. “Lo bueno es que no hemos estado viendo un aumento de muertes y casos graves, como sucedió en otras oleadas de la enfermedad, y esto solo puede ser el efecto de la inmunización”, expresó.
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